Anoche aproveché que no tenía mucho sueño para seguir leyendo el manual básico de RuneQuest II en la cama y me pasó algo curioso.
No sé si serían las altas horas de la mañana, el silencio de la noche, el momento de relajación… pero, a medida que iba leyendo las reglas de creación de personajes, mi mente se veía asaltada con flashbacks de mi primera partida rolera.
Es curioso cómo funciona nuestra memoria asociativa, a lo largo de los años he jugado muchas partidas y muy buenas, pero aun así no eran estas imágenes más recientes o míticas las que recordaba, sino aquellas difusas situaciones vividas allá por el año 1992 o 1993 (si mis cálculos no me fallan, recuerdo que estaría en sexto o séptimo de EGB) en el colegio Gonzalo de Berceo de Coslada, en unas jornadas organizadas por la asociación juvenil Quetzalcoatl.
Por aquel entonces tendría yo unos 12 años, recuerdo que no había jugado nunca a un juego de rol, pero sin embargo algo tendría que saber de ellos, pues mis padres me habían comprado (a mi petición) el Señor de los Anillos básico (la edición simplificada en caja de JOC) y me lo tenían guardado hasta que llegara el día de los Reyes Magos.
Tampoco recuerdo cómo me enteré de estas jornadas, supongo que con carteles puestos por las calles o en el mismo colegio, pero allí fui con varios amigos y descubrimos este mundillo que nos atrapó al momento.
La partida fue al RuneQuest, recuerdo perfectamente a Gulitrakis, mi personaje, un campesino armado con una guadaña sobre la que empleaba el hechizo cuchilla afilada (imagen que me vino de golpe al leer anoche el apartado de magia y ver el bladesharp). La partida fue corta (lo que daba de sí esas jornadas), pero intensa y además recuerdo que nos dejaron quedarnos con las hojas de los personajes las cuales emplearíamos posteriormente mi grupo de juego para otras partidas (no se me borrará de la mente el día que jugando en mi casa le corté una pierna con la guadaña al personaje de un amigo debido a una pifia).
De estos recuerdos mi mente saltó a mis días en aquellos tiempos, hace casi 20 años, la situación del rol en ese momento y la actual.
No sé si sería por alguna moda, pero el caso es que en aquellos tiempos entrabas en una papelería y tenías juegos de rol, ibas a la sección de libros de El Corte Inglés y allí había juegos de rol, en el kiosko podías encontrar la revista Dragon, en sitios más especializados la Lider… En una población no demasiado importante como Coslada teníamos una asociación de rol (la mencionada Quetzalcoatl) que se reunía todos los fines de semana para jugar, con su biblioteca de juegos y la organización de jornadas anuales (en una de las cuales incluso iba a dirigir yo una partida, lástima que no se presentara nadie para mi juego).
Ahora, con Internet al alcance de la mano de cualquiera, un poder adquisitivo mucho mayor entre los chavales, multitud de librerías especializadas en el tema, etc. tengo la sensación de que el rol ha vuelto a la cueva oscura. No sé si algo tendría que ver aquel tristemente famoso «asesinato del rol», pero creo que ya ha pasado suficiente tiempo para haber recuperado el terreno perdido por el daño causado en la opinión pública por dicho incidente.
Sin duda para mí la mejor manera de iniciar a alguien en este mundillo es como lo hice yo, probándolo, dejando que lo experimente por sí mismo, dejando atrás los prejuicios. Toda la divulgación que hacemos por Internet en el fondo solo es captada por un mínimo porcentaje de gente que no lo haya probado y así poca afición podemos crear.
Creo que lo que nos falta son más asociaciones como aquella Quetzalcoatl, gente dispuesta a hacer un pequeño esfuerzo y sacrificio para organizar eventos de captación de nuevos aficionados mediante jornadas abiertas y gratuitas, pues estoy seguro que si no hubiera sido por ellas ni yo ni muchos de mis amigos habríamos tocado un juego de rol quizá en la vida.
Y esta reflexión me lleva como punto final a mí mismo, a mi lugar «acomodado» quejándome de que las cosas ya no son como antes sin hacer nada por cambiarlo. Quizá todavía esté a tiempo para hacer algo de forma más activa, formar una asociación e intentar recuperar estas jornadas, pero para ello necesito más gente, ¿alguien se apunta?
Saludos
Qué cabrón que eres, tenías que soltar lo de la pifia con la guadaña, ¿no? XDDDD Qué recuerdos los de aquellas partidas.
El problema es que ahora el entretenimiento se ha dirigido hacia otros cauces. Los niños y los no tan niños juegan en casa con consolas y ordenadores. Que también los había cuando nosotros teníamos doce años, sí, pero ahora la oferta es brutal y es lo que predomina.
La verdad es que no suena mal eso de montar una asociación. Cuenta conmigo. Nos vamos informando en el ayuntamiento de cómo organizarlo, si hay subvenciones, si podemos tener algún sitio en las Casas de la Juventud…
Sí, Dek, ahora la oferta es brutal, pero si no hacemos nada nosotros esta generación se perderá y este mundillo no puede vivir solo de los cuatro gatos que quedamos.
He estado echando un vistazo a lo de la asociación y parece más fácil de lo que pensaba, tan solo hace falta 3 fundadores, comprar unos libros, pagar unas pequeñas tasas y llevar el papeleo a los sitios apropiados.
A ver si lo hablamos, tengo unas cuantas ideas, si le echamos ganas creo que podemos hacer algo muy interesante 🙂
Claro que lo sigo =)
Mira, en eso de experiencia yo creo que nos superas a todos nosotros; somos chavales de entre 20-23 años, y el que más experiencia tiene en el mundillo soy yo con 6 años; la cosa es que yo estoy metido en el mundillo a unos niveles altos, pero es simplemente porque adoro esta afición.
Hacer una asociación es muy fácil, en serio. Búscate cuatro personas más; pon en google «estatutos de una asociación juvenil» y luego «como hacer una asociación juvenil». Tras esto, rellena y sigue los pasos perfectamente explicados, échale muchas muchas ganas, tiempo y esfuerzo. ¨Y sobretodo, piensa que todo ello te tiene que gustar.
Si cumples estos requisitos, perfecto. Si no, es momento para cumplirlos ¿no? Ojalá todo vaya bien y te animes, Israel. Como tú me comentas, si me lees sabrás que yo soy un firme defensor de estos colectivos.
Un saludo!
Gracias por la información.
En nuestro caso más que una asociación juvenil deberíamos hacer una cultural (pues ya estamos en la treintena), pero sí, supongo que será parecido.
Mucho ánimo también con vuestra asociación y ya os contaré si sale esto adelante 🙂
Saludos
Vaya una sorpresa. Las jornadas en el Gonzalo Berceo fueron en el 93 (tenia yo 13 años) y las recuerdo porque también fueron mis primeras jornadas 😉 Yo jugué a Dragonlance y a vampiro primera edición.
Me suenas bastante pero es que soy muy malo con nombres y caras. Yo soy Sergio y solia jugar con mi hermano Miguel, David, los hermanos Llorente y Adrian. Lastima de la desaparicion de la Casa de la Juventud y de Quetzalcoatl.
Montar una asociación es fácil, lo difícil es el sitio. Estoy ahora en otra asociación cultural de Coslada llamada Los Caballeros Templados, y aunque no es de rol en exclusiva si que montamos alguna partida de vez en cuando. Pero no es lo mismo, no veo la misma pasión en la siguiente generación. Amen que nos cuesta mucho mas reunirnos a jugar una partidilla.
Si quieres hablar puedes mandarme un correo.
Hola,
Yo la verdad es que de nombres tampoco recuerdo mucho, solo a David (no sé si es el mismo que dices tú, éste iba al Rafael Alberti conmigo), Godoy y su hermano Jacobo (éste último jugaba con nosotros) y de vista a uno que llamaban Piñas.
En Los Caballeros Templados no habéis hecho ninguna jornada, ¿verdad?
Saludos.
Ya le preguntare cuando vea a David, que el tiene mejor memoria 😛
Jornadas de rol no hemos hecho porque no somos gente suficiente dedicado a ello, si que hemos hecho torneos de Bloodbowl, vamos a hacer un cursito para pintar figuritas…
Bueno, si hablamos del mismo David seguro que se acuerda de mí, pues hasta coincidimos un año en la clase del instituto.
Bueno, bueno, las jornadas del Gonzalo de Berceo y el club Quetzalcoatl… qué recuerdos. Mi personaje fue Torpo el Babuino, del que únicamente recuerdo que tenía fuerza 19 y que su nombre real era Kuzchan :D. Nos lo pasamos muy bien en esas jornadas la verdad :).
Me apunto a la asociación. Ya sabéis que por el momento estoy un poco liado con el benjamín de mi Numerosa Familia, pero tarde o temprano volveré a recuperar mi vida friki ;).
No te preocupes Carlos, sabes que tienes tu hueco guardado siempre que quieras 🙂
Aunque no te pases sigues ejerciendo de «guía espiritual», así que no te escapas de mis preguntas xD
Señores, según vuestro criterio, ¿cuáles son los mejores juegos de rol? Ya sé que cada uno es diferente, pero venga, hombre!! intentemos hacer un ranking, que siempre es entretenido
Hola,
Perdona por no contestar, pero he estado enfermo los dos últimos días.
Los de qué juegos de rol son los mejores es algo muy subjetivo, no creo que haya baremos objetivos para elegir uno u otro.
En mi caso particular, seguramente a los que más haya jugado sean RuneQuest y AD&D, pero al que guardo más cariño es al Stormbringer. El uso de los demonios atados a objetos, a pesar de no pegar con los relatos de Moorcock (de ahí que los quitaran en la última edición) me fascinó y todavía me parece una gran idea.
Por otro lado el AD&D ambientado en la DragonLance también me gusta mucho, más por ambientación que por las reglas.
El módulo de Los Vikingos de RuneQuest también me encanta.
De lo actual no estoy muy al día, pero el RuneQuest II de Mongoose ya me lo he leído y, sin probarlo todavía, tiene una pinta brutal.
¿¡Quitaron la posibilidad de atar demonios a objetos?! Entonces, ¿sólo podían invocarse?! Pues que quieres q te diga, pero suprimieron lo mejor del juego, de hecho, era la única forma de crear objetos mágicos realmente interesantes y originales. Aunque en las reglas había algunas lagunas (yo tuve que hacer un Anexo propio al juego para completar) las posibilidades que te ofrecía esa parte de la magia con un poco de imaginación eran infinitas.
De todos modos, ahora que lo pienso, en los relatos de Moorcock, aunque puede que no se diga expresamente, sí había armas-demonio (la propia stormbriger o mournblade, o la armadura de Yyrkoon si no recuerdo mal), y puede que algún otro objeto, no sé…
Hola Rakinalef,
La verdad es que el tema de los demonios atados era una parte chulísima de Stormbringer, pero estaba muy mal nivelado y, en cuanto tuvieras unos cuantos personajes hechiceros, pronto conseguías tener todo demonio y unos personajes inmortales (a menos que le saliera un crítico al enemigo que ignoraba armadura y ya tenías un personaje muerto…).
En el último Elric de Mongoose lo han eliminado sabiamente porque en las novelas no aparecen explícitamente en ninguna parte. Stormbringer y Mournblade en realidad son demonios con forma de espada (como se ve en la escena final de Stormbringer cuando adopta su forma demoníaca), no demonios atados a espadas. La armadura de Yyrkoon no recuerdo qué tenía de especial…
Lo que se ha introducido para paliar esta deficiencia son las runas que se pueden inscribir en objetos para darles cualidades mágicas, pero los demonios solo son invocables para que actuen en un plazo de tiempo.
No obstante como digo me sigue pareciendo algo muy atractivo, especialmente si se usaban con inteligencia para hacer objetos demonio más curiosos que armas o armaduras (como remos, llaves, etc.), así que uno de mis futuros proyectos roleros es adaptarlo de alguna manera al RuneQuest II, pero para usarlo en una ambientación propia, no quiero «manchar» la de Elric ahora que se ajusta más a las novelas.
Saludos
Bueno, eso tiene algo de más lógica. Cuando yo dirigía no aplicaba la regla de las armas demonio (posibilidad de que se rompiera y todo eso) porque eso te obligaba a enfrentarte con enemigos con idénticas armas todo el tiempo, sino la cosa no tenía interés alguno.